En el vidrio.
Después de insistir mucho,
conseguí quedarme diez minutos solo con mi madre.
Un guardia gordo, que mascaba chicle,
me llevó hasta el lugar de visitas.
Estaba ahí, de pie, con su delantal naranja.
Separados por un vidrio inmenso
nos sentamos uno frente al otro.
Ella agarró su teléfono, yo agarré el mío.
Su idioma era un extraño
caminando por una voz muy débil.
Entonces, viendo mi desesperación,
se acercó al vidrio
y lo empañó con el aliento.
Con el dedo índice escribió ahí
el día y la hora en que va a resucitar.
Brasas.
Toda la noche caminando sobre brasas
y a lo lejos las puertas de los autos
que se cierran de un golpe.
Estás harto de la comida seriada de los aviones
y del doble que crece a costa de tus nervios
tratando de conquistar el mundo
o metabolizar el día.
Que está extraviado. La buena onda
se echó a perder hace una semana.
A los jeans mojados les crecieron hongos.
Y las palabras que elaboraste de disculpa
son las migas que deja un paranoico
para saber cómo volver a casa.
Fabián Casas es argentino y nació en 1965.
Pulir huesos es una antología de veintitrés poetas latinoamericanos, con selección y prólogo de Eduardo Milán. Galaxia Gutenberg.
La ilustración es de la grandísima Ruth Gwily.
domingo, 17 de febrero de 2008
Fabián Casas. En el vidrio. Brasas.
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Poetas habla hispana
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